miércoles, 3 de noviembre de 2010

TODAS LAS FUERZAS UNA FUERZA



FUERZAS DEL UNIVERSO
Cada uno de nosotros tiene la capacidad para encontrar su parte invisible, usar su mente a su antojo y reconocer aquello que conforma su naturaleza humana. Su dimensión humana no se refiere a una forma o un cuerpo, sino a alguno mucho más trascendental, guiado por unas fuerzas del universo que están siempre en funcionamiento.
Toda creación humana comienza con un pensamiento, una visión, una imagen mental. La capacidad de pensar no tiene límites. Creer que somos un alma acompañada de un cuerpo en vez de un cuerpo dotado de un alma.
La certeza de que existe una inteligencia invisible, intocable, imperceptible y sin embargo muy real, detrás de, en todo, siendo parte de, apoyando, toda forma. Llamala como quieras, nombrala Dios, Ala, Buda fuerzas de vida, conciencia superior, espíritu divino, Orisha, energia del universo, ya que el nombre no importa; su existencia, por el contrario, sí.

Cada uno construye su propio camino, y todos juntos somos el futuro, cada pensamientos, cada acción hace que nos convirtamos literalmente en lo que pensamos y contamos con el don de poder escribir nuestra propia historia. No hay un camino hacia la felicidad, la felicidad es el camino.
Si ya está probado que el tiempo no existe, creamos que podemos encontrarnos con cualquier cosa que deseemos. La oportunidad de hacer que el pensamiento se convierta en realidad física depende de nosotros.
Todo, absolutamente todo es energía. Nada es sólido. Todo oscila en su propio nivel de realidad. La energía es la sustancia del universo y los pensamientos son parte de esa sustancia. Si realmente quisieramos que algo nos sucediese, sabriamos que la clave consiste en sintonizar la dos frecuencias para que todo se convierta en realidad;
1.- Aquello en lo que nosotros concentremos nuestros pensamientos se expande y
2.- Aquello en lo que pensemos con todo nuestra fuerza, acabará siendo lo que elejimos para ampliar. Todos actuamos según las pautas de nuestros pensamientos y los mismos se convierten en nuestra experiencia diaria.

Nuestra capacidad para disfrutar de la vida procede de nuestra manera de procesarla, y no de la influencia de factores externos. Nada en el exterior tiene la capacidad de crear felicidad o plenitud en nosotros. Lo que determina la calidad de nuestra vida es nuestra decisión de sentirnos satisfechos o no, basada en nuestra forma de pensar, de vernos y de situarnos en el universo. Todo lo que demos se tranforma, todo lo que hayamos recibido se transforma, entonces llego el mometo de creer que si somos muchos mas.... los que queremos la felicidad no solo nuestra sino para muchos otros ... acaberemos recibiendo esos mismos pensamientos de todos esos otros.
Dr. Wayne Dyer

1 comentario:

moro dijo...

GRACIAS POR TODO ESTO,,,
DA QUE PENSAR HARTO...
TE AMO.

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