LA LEYENDA DE LOS AMANTES

Muchas veces este llamado “Homo Sapiens”, pretende imponerse ante todo y ante que todo, inventando preceptos, verdades absolutas e irrefutables, construciones categoricas del deber ser, la moral y lo correcto, hasta que un simple día, la vida le presenta ante sus ojos, que hay lenguajes nuevos por descubrir, bellezas no condicionadas a normas ni modelos, simplicidad y perfección del embrujo del arte de amar, de unas simples babosas.

Las babosas son animales hermafroditas, cuando un individuo busca tener sexo con otro, le proporciona a su baba un sabor especial, que el sujeto interesado si siente lo mismo que este... detecta el rastro y lo saborea … siguiendo a su pareja a donde este lo lleve, a ratos le muerde, para hacerle saber que se encuentra tras de el, el anfitrion se contornea, expeliendo cada vez mas baba, y busca un lugar alto, generalmente una rama, desde donde colgarse e iniciar su danza erotica.
Ambos sujetos entre suciones y fricciones, se enrrollan y desenrrollan, sin apuros, sin urgencias, donde cada acto de frotamiento reproduce un nuevo movimiento sensual, por un tiempo aproximado de una hora, luego de esto como un nuevo juego de erotismo la pareja se suelta de las ramas, enlazados y asistidos por un cordel de mucosidad, alli nuevamente se trenzan, y vuelcan todo sus cuerpos sobre ellos mismos, como un solo sujeto… en ese instante ambos extraen desde detrás de sus cuellos el organo masculino y comienzan a efectuar, al compas de una verdadero concierto, unos movimientos con su pene, en el cual lo alargan y lo expanden, ambos miembros se entrelazan entre si… al igual que sus cuerpos…reproduciendo una verdadera flor que se expande y se contrae… en movimientos circulares… en este instante ambos sujetos intercambian sus fluidos, fertilazandose mutuamente, la danza entonces ha llegado a su fin.