Mi Otra Niña…Sueña con surcar océanos profundos, alcanzar abismos insondables, danzar al ritmo de los cardúmenes, toparse con mantarrayas, pulpos y toda clase de seres marinos. Mi otra niña amaneció descubriendo al mundo, cuestionando la existencia y sufriendo por la vida humana, en honor a ella se hizo vegetariana.
Para ella cada célula, partícula o átomo representan una maravilla de la naturaleza, así como puede subir a lo alto y darme cátedras de ciencia, puede bajar a mi regazo y abrazarme asustada por los fantasmas y demonios de su existencia.
Mi otra niña, es una gota de rocío, amada desde el primer segundo, luz de tinieblas y fuerza de vida, hace poco descubrí que escribe mucho mejor yo, tiene un estilo único, interesante.
Mi otra niña es la luna mapuche, que vino a alumbrar y darle fuerza a mis luchas.
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